A menudo nos preguntáis y pedís consejos sobre cuál es el mejor recuerdo para llevarse de Sevilla, así que hoy os traemos la mejor selección de recuerdos, arte y artesanía local para llevaros a casa. No nos olvidamos de los excelentes productos gastronómicos de nuestra tierra, ni de los libros. A ellos les dedicaremos otro artículo próximamente.

Nos fascinan los objetos de Tuki&Co que crean estos arquitectos reconvertidos en diseñadores. Además de su belleza y originalidad nos encantan sus precios, lo poco que ocupan, lo ligeros que son y lo fácil que es llenar la maleta de regalos preciosos para todos con sus diseños, ya sean de la Catedral o de la Feria o la Semana Santa. Los encontraréis en multitud de pequeñas tiendas por la ciudad, y también en las tiendas de la Catedral o el Museo de Bellas Artes.

Maqueta en papel de una cofradía
También para manitas y para niños de todas las edades son perfectos estos recortables de cofradías, hay varios modelos, uno de la Macarena y hasta una edición de la romería del Rocío! El precio y la facilidad y ligereza para transportarlos, son un plus!

Las Moradas, artesanía en el barrio de Santa Cruz
En plena plaza de Doña Elvira, a cinco minutos de la Catedral, encontramos Las Moradas, que al estilo de una cueva del Tesoro, pone a nuestra disposición artesanía en cerámica, madera, cuero, seda… Todo con un gusto exquisito, pero nuestros favoritos son los bolsos, agendas, carteras y pulseras de cuero.

Relicario y Cía
Nos encantan los broches con ilustraciones icónicas del arte andaluz que hace esta artesana. Venta por encargo a través de Facebook. Envía a Europa y EE.UU.

Muñecas de gitana
Si te va lo castizo y cañí aún puedes encontrar estas muñecas en los establecimientos de toda la vida (búscalas por la calle Sierpes). La empresa familiar que los fabricaba, Marín, cerró hace no mucho, así que vigila que no estén hechas en China!! Otra cuestión es buscarle un sitio, ahora que las televisiones son planas…

Zapatos de flamenca infantiles
Cualquier niña adorará estos zapatos. Cómpralos en zapaterías y busca que estén hechos en España, la diferencia de calidad es más que notable. Los hemos visto en la calle Córdoba (junto al Salvador) , en la Calle Mesón del Moro (barrio Santa Cruz) y en la Avenida de la Constitución.

Cerámica de Triana
Alrededor del Mercado de Triana, y del centro de interpretación de la Cerámica hay tiendas y talleres donde pasar un buen rato buscando esa pieza especial. También suelen trabajar por encargo si quieres una pieza exclusiva y personalizada. Te llevas un pedazo de una tradición milenaria.

Abanicos
Toda mujer andaluza lleva un abanico en el bolso. Lo mismo te sirve para cuando hace calor que para evitar olores molestos, aliviar un mareo, un sofoco, o estar en un sitio agobiante. Vamos, que necesitas uno ya. Y para colmo son preciosos, ligeros y los hay desde 5€ hasta lo que quieras, dependiendo de la madera o material de las varillas (nos encantan los de madera de peral) y del país, que pueden ser de tela común, madera, encaje, seda…. Y de si están pintados a mano o no. En fin, que hay un abanico para cada persona (sí, también hay de hombres) y para cada bolsillo. Nos encanta ir a ZADI o DIZA (calle Tetuán y Sierpes) donde hay variedad, y mucha tradición vendiendo abanicos, así que siempre nos aconsejan fenomenal y tienen una paciencia infinita, porque a veces es muy difícil decidirse. Otro sitio maravilloso donde podrás personalizar tu abanico con tu nombre o el de la persona a quien se lo regalas está en el Callejón del Agua, en el barrio de Santa Cruz , pero hay muchos sitios donde curiosear y buscar.

Mantones de Manila
Aquí hay dos gamas, el bordado a máquina y el bordado a mano, la seda natural y la sintética…y desde luego se nota en el precio. La gama de colores y motivos es infinita, eso sí, limitaros a ver lo que vuestro presupuesto pueda afrontar (desde 20 a 3000€) Esta prenda tiene su origen en China, pero como se embarcaban para exportarlas en Manila, origen de la flota de Indias en Asia, tomó ese nombre. Su uso se hizo muy popular en el siglo XVIII.

Y sigue siendo así hoy en día, una prenda para las grandes ocasiones. Nos encanta la tienda de Juan Foronda en la Calle Argote de Molina, en una casa típica sevillana donde es toda una experiencia echar un rato de compras. Hay más sitios sin duda, nos limitamos aquí a daros pistas e indicaciones sobre nuestros productos y tiendas favoritos. Nos hemos quedado sin sitio para hablar de castañuelas, instrumentos, mantillas, peinetas… o de tiendas emblemáticas como Blasfor, Artesanía Textil, Calzados Mayo, etc… Sin olvidar las antigüedades.

Estas disposiciones no fueron duraderas ni eficaces, pero nos habla de unos hechos a menudo desconocidos y de los que no se suele hablar, ni siquiera en los centros educativos. Pero merece la pena imaginar una Sevilla con un porcentaje llamativo de población negra, muchos de ellos llevando una carimba en el rostro, tal vez con el anagrama “ESCLAVO”, una S y un clavo (la primera que aparece en la imagen); aunque el carimbo se usó mayormente en las colonias americanas, mucho más difíciles de controlar por las autoridades. Otra curiosidad es que los hierros de carimbar se guardaban bajo llave en dependencias administrativas de la autoridad, o sea, que la carimba estaba perfectamente regulada por las leyes, y era como nuestros sellos de aduanas o de control de la CE o la matrícula en los coches, pues no se les consideraba más que mercancía. Y, además, por mandato real, los custodios y encargados de carimbar no podían cobrar por ello o cobrar, en todo caso, muy poco para evitar que se convirtiera en un negocio, como ya había ocurrido en algunos lugares.

Hasta 1679 no se suprimió la esclavitud indígena en los dos virreinatos y el carimbo aún tardaría un siglo más en ser prohibido completamente, ya en época ilustrada.